La impotencia aprendida: cómo superar la sensación de falta de control en nuestras vidas
La impotencia aprendida: cómo superar la sensación de falta de control en nuestras vidas
La Impotencia Aprendida: ¿Qué es y Cómo Puede Superarse?
La impotencia aprendida es un fenómeno psicológico en el que una persona se siente incapaz de cambiar su situación actual, aunque en realidad sí tiene las herramientas necesarias para hacerlo. Esta sensación de impotencia puede ser muy frustrante y generar diferentes problemas emocionales y físicos.
En este artículo explicaremos en qué consiste la impotencia aprendida, cómo se desarrolla y cuáles son sus consecuencias. Además, daremos algunos consejos para superarla y recuperar el control sobre nuestras vidas.
¿Qué es la impotencia aprendida?
La impotencia aprendida fue descrita por primera vez por el psicólogo Martin Seligman en los años 60. Seligman realizó un experimento en el que sometió a perros a descargas eléctricas aleatorias e impredecibles. Al principio, los perros intentaban escapar o evitar las descargas, pero después de varios intentos fallidos, dejaban de hacerlo y se quedaban inmóviles, aceptando pasivamente las descargas.
Este comportamiento apático y pasivo también se puede observar en personas que han sufrido situaciones similares. La impotencia aprendida se caracteriza por una sensación de falta de control e incapacidad para modificar la situación actual. La persona afectada siente que cualquier acción que tome no tendrá resultado, por lo que se desanima y pierde la motivación y la esperanza.
Cómo se desarrolla la impotencia aprendida
La viagragenerico se desarrolla cuando una persona se enfrenta repetidamente a situaciones en las que no puede controlar el resultado o las consecuencias de sus acciones. Estas situaciones pueden ser muy variadas: desde un entorno familiar disfuncional hasta un trabajo que no ofrece oportunidades de crecimiento o desarrollo.
Cuando una persona se enfrenta a estas situaciones, puede reaccionar de diferentes formas. Al principio, es posible que intente cambiar la situación y buscar soluciones para mejorar su situación. Sin embargo, si estos intentos no tienen éxito y la persona sigue sin poder controlar la situación, puede desarrollar una sensación de impotencia y desesperanza.
Esta sensación de impotencia puede convertirse en un patrón de pensamiento negativo y autolimitante. La persona afectada puede pensar que no tiene las habilidades o recursos necesarios para cambiar su situación, lo que hace que pierda la motivación y la esperanza.
Consecuencias de la impotencia aprendida
La impotencia aprendida puede tener consecuencias emocionales y físicas. En el plano emocional, puede generar tristeza, ansiedad, estrés e incluso depresión. La persona afectada puede sentirse atrapada en su situación actual y sin salida aparente. Además, puede perder la autoestima y la confianza en sí misma.
En el plano físico, la impotencia aprendida puede afectar la salud. Por ejemplo, puede provocar insomnio, dolores de cabeza, problemas digestivos, hipertensión arterial y otros trastornos relacionados con el estrés crónico.
Cómo superar la impotencia aprendida
Aunque la impotencia aprendida puede parecer una situación difícil de superar, existen algunas estrategias que pueden ayudar a recuperar el control y la motivación.
1. Identificar y reconstruir los patrones de pensamiento negativos
Lo primero que hay que hacer es identificar los patrones de pensamiento negativos que están alimentando la sensación de impotencia. La persona afectada debe preguntarse qué pensamientos y creencias limitantes tiene sobre sí misma y su situación actual. Una vez identificados estos patrones de pensamiento, es importante cuestionarlos y buscar evidencia que los refute.
2. Aprender habilidades y estrategias para afrontar situaciones difíciles
La persona afectada debe aprender nuevas habilidades y estrategias para afrontar situaciones difíciles. Por ejemplo, puede aprender técnicas de resolución de problemas, de gestión del tiempo o de comunicación asertiva. Es importante recordar que todas las habilidades pueden ser aprendidas y desarrolladas con práctica y perseverancia.
3. Establecer metas realistas y alcanzables
Otro paso importante es establecer metas realistas y alcanzables. Es importante fijarse objetivos que sean específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con límite de tiempo.